La propuesta impulsada por el Ejecutivo busca atraer a estudiantes de buen rendimiento académico y no disminuir la matrícula para los nuevos profesores. Las nuevas exigencias rigen desde el año 2026.

Por una mayoría de 89 votos a favor, 36 en contra y 21 abstenciones, la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó, en general y en particular, y despachó al Senado el proyecto que redefine las exigencias para el acceso a las carreras y programas de pedagogía (boletín 14151).

La norma, informada a la Sala por el diputado Mario Venegas (DC), busca atraer a estudiantes de buen rendimiento académico y cuidar que los requisitos no tengan un impacto negativo en la matrícula.

De dicha manera, se espera disminuir el déficit de docentes existente, que se incrementaría en los siguientes años, y permitir que más estudiantes puedan seguir su vocación pedagógica, sin descuidar la calidad de la educación que debe cumplir el impartir dichas carreras.

El texto modifica la Ley 20.129, que establece el Sistema Nacional de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, y consigna que las universidades, a partir del año 2026, solo podrán admitir y matricular en dichas carreras y programas regulares a alumnos que cumplan, a lo menos, con alguna de las siguientes condiciones:

  1. Haber rendido la prueba de selección universitaria o el instrumento que la reemplace y obtener un rendimiento que lo ubique en el percentil 60 o superior (aprox. 525 puntos), teniendo en cuenta el promedio de las pruebas obligatorias.
  2. Tener un promedio de notas de la educación media dentro del 20% superior de su establecimiento educacional, según el reglamento respectivo.
  3. Tener un promedio de notas de la educación media dentro del 40% superior de su establecimiento educacional, según el reglamento respectivo, junto con haber rendido la prueba de selección universitaria o el instrumento que la reemplace y obtener un rendimiento que lo ubique en el percentil 50 o superior, teniendo en cuenta el promedio de las pruebas obligatorias.
  4. Haber realizado y aprobado un programa de preparación y acceso de estudiantes de enseñanza media para continuar estudios de pedagogía en la educación superior reconocido por el Ministerio de Educación y rendir la prueba de selección universitaria o el instrumento que la reemplace.

 

En tanto, para los procesos de matrícula desde el próximo año y hasta el 2025, se mantendrán las actuales exigencias, que originalmente solo estaban vigentes hasta el 2022, extendiéndolas hasta el 2025.

Es decir, ubicarse en el percentil 50 o superior de rendimiento en la PSU o instrumento que la reemplace (500 puntos aprox.); tener un promedio de notas de la educación media dentro del 30% superior de cada establecimiento y haber aprobado un programa de preparación y acceso para estudiantes de educación media de ingreso a carreras de pedagogía.

De tal forma, las universidades contarán con más tiempo para desarrollar, perfeccionar y    promocionar sus programas de acceso a las carreras de pedagogía, los cuales permiten que los estudiantes que no cumplen con los demás requisitos de acceso, puedan, de todos modos, entrar a estudiar dichas carreras.

Debate

Las y los parlamentarios reconocieron la labor docente como el alma del país, así como los esfuerzos por incentivar a los alumnos a estudiar pedagogía, pero lamentaron que los estímulos no incluyan un aumento en las remuneraciones de los profesores.

Hicieron ver que son las condiciones de empleabilidad las que se deben mejorar para lograr el incentivo a los jóvenes que opten por ser profesores.

Agregaron que las autoridades educacionales deben hacerse cargo de la deserción docente y calificaron de insuficiente la iniciativa, por la falta de reconociendo social hacia los profesores.

En el debate participaron Pedro Velásquez (IND), Raúl Zaldívar (PS), Juan Fuenzalida (UDI), Mario Venegas (DC) y la diputada Camila Rojas (Comunes).