ENADEL revela que en Ñuble el sector Comercio está optimista y el Silvoagropecuario aún en incertidumbre por medidas sanitarias Covid
Encuesta Nacional de Demanda Laboral aplicada en la región por segunda vez por el Observatorio Laboral de Ñuble caracterizó a empresas, sus vacantes, capacitaciones y midió el impacto de la pandemia.
Un 62 por ciento de las empresas del Comercio y un 49 por ciento del sector Silvoagropecuario de Ñuble estuvo operando con alguna dificultad derivada de la pandemia de COVID-19 reveló la segunda versión de la Encuesta Nacional de Demanda Laboral (ENADEL) 2020 realizada en la región.
Los resultados son parte del estudio aplicado por el equipo multidisciplinario del Observatorio Laboral de Ñuble de SENCE-UBB entre octubre del año pasado y enero de 2021 a un centenar de empresas regionales de ambos sectores económicos y que emplean aproximadamente a 12.900 personas.
Durante el seminario virtual, desarrollado este viernes, el subdirector nacional del Sence, Ricardo Ruiz de Viñaspre destacó el aporte que persigue este estudio que se aplica en todo el país. ‘Cuando nos juntamos Estado, representado por el SENCE, la academia y el sector privado, estamos seguros que obtenemos mejores resultados que si tenemos una política pública, que se elabora entre cuatro paredes’, comentó.
El gerente general de OTIC SOFOFA Capital Humano, Cristóbal Philippi, también valoró las cifras y conclusiones de la encuesta, que son el fruto del apoyo brindado por la entidad privada. ‘Desde 2016 nosotros nos involucramos muy fuertemente en la creación de los Observatorios Laborales. Esa información es esencial para el futuro de las personas y lo que hacen los observatorios laborales es proveer esa información muy detallada y precisa a niveles locales. Ver una segunda ENADEL es un orgullo y me llena de satisfacción haber contribuido a la generación de instituciones que hoy están produciendo información valiosa, útil y permanente’, sostuvo.
En cuanto a los resultados, el director del observatorio ñublensino y académico de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad del Bío-Bío, Bernardo Vásquez, explicó que ENADEL tiene por objetivo caracterizar la dotación de las empresas, conocer las vacantes difíciles de cubrir y proyectadas, visualizar las capacitaciones y tecnologías requeridas, además de graficar el impacto de la pandemia.
‘Sin duda la pandemia afectó a ambos sectores, pero mientras en el Comercio muestra un optimismo ante la posibilidad de reactivación económica de la región, en el sector Silvoagropecuario y Pesca hay incertidumbre de cómo pueda afectar en el futuro y que las medidas sanitarias impuestas puedan traer consecuencias para sus operaciones’, dijo durante la exposición de los resultados transmitido a través del canal YouTube de SENCE.
El seminario contó con un panel de análisis de los resultados a cargo de José Concha, director y presidente del Comité de Innovación y Tecnología de la Cámara de Comercio, Industrias, Turismo y Servicios de Chillán Ñuble AG.; Alfredo Wähling, presidente de la Asociación de Agricultores de Ñuble; Benito Umaña, decano de FACE-UBB; y Yeniffer Ferrada, seremi del Trabajo y Previsión Social.
‘Los subsidios al empleo que se están entregando para poder mitigar lo que ha generado la pandemia han ayudado a los principales rubros de la economía, y esto es fundamental porque se trata de recursos que van destinados a la generación de fuentes de trabajo formales, con seguridad social. Sabemos que es fundamental que sigamos tomando todos los resguardos y medidas necesarias para tener una reactivación segura, y muestra de ello es que cerca del 90 por ciento de las empresas declaran que han efectuado capacitaciones y ajustes en sus protocolos para proteger eficazmente la integridad de los trabajadores’, destacó la Seremi.
El director regional de Sence, Rodolfo Zaror, indicó que entre las principales medidas que tomaron las empresas en los sectores Comercio y Silvoagropecuario para enfrentar la pandemia fueron capacitar a los trabajadores en protocolos y nuevas funciones (80,3 y 93 por ciento, respectivamente), reducir la jornada de algunos trabajadores (51 y 25,5 por ciento) e implementar teletrabajo (35,6 y 29 por ciento).
‘La información entregada por el observatorio en la ENADEL no es solo para calibrar las políticas públicas, sino también que las empresas tienen un mecanismo propio a través de la franquicia tributaria. Ellas pueden hacer uso de ella donde detecten la necesidad de capacitación’, dijo.
