El Delegado Presidencial Regional, Cristóbal Jardua; destacó la ley Sinapred, precisando que el nuevo servicio viene a descentralizar y desconcentrar territorialmente el trabajo de prevención y respuesta ante emergencias. La directora Regional de Onemi, en tanto, explicó que el principal cambio pasa por “pasar de tener un documento de carácter indicativo, a una Ley”.

El Presidente de la República, Sebastián Piñera, promulgó este pasado martes la ley que establece el Sistema Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres. La ley sustituye a la Oficina Nacional de Emergencia (ONEMI) por el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED), el cual reconoce e incorpora todos los avances y desarrollos que se han logrado en función de las buenas prácticas y lecciones aprendidas en esta última década por el actual sistema nacional de protección civil y por la ONEMI.

El Delegado Presidencial Regional de Ñuble, Cristóbal Jardua, destacó la promulgación de esta nueva ley, que permitirá no tan solo ser reactivos con mayor apoyo ante emergencias, sino que ahora, ser mucho más preventivos. “El Presidente Piñera se propuso cambiar la institucionalidad, crear una nueva institución que tuviera más atribuciones, más facultades, más poderes y más potencia para prevenir, enfrentar y recuperarnos cuando la adversidad quisiera nuevamente mostrarnos su rostro, y hoy se da vida a esta ley, muy necesaria para nuestro país, y en especial en nuestra región de Ñuble que, debido a la diversidad y extensión de nuestro territorio, presentan variadas amenazas. Como región ya nos veníamos preparando para este cambio, por eso en junio recién pasado, conformamos la plataforma regional para la reducción de desastres naturales”, señaló el Delegado Jardua.

El nuevo servicio, que asumirá las obligaciones y derechos de la ONEMI, además de nuevas funciones, será una entidad descentralizada y desconcentrada territorialmente, a cargo de asesorar, coordinar, organizar, planificar y supervisar las actividades relacionadas a la Gestión del Riesgo de Desastres del país. El servicio estará a cargo de un Director Nacional, quien será el jefe superior del Servicio, mientras que en cada región habrá una Dirección Regional del Servicio, a cargo de un Director Regional.

“Se trata de un avance bastante significativo, porque primero pasamos de tener un documento de carácter indicativo, como es el Plan Nacional de Protección Civil, a una ley, que además recoge todo lo avanzado en el ámbito de la gestión del riesgo de desastre en nuestro país, con base en las lecciones aprendidas, junto con recomendaciones y estándares internacionales”, señaló por su parte, la directora regional de Onemi, Gilda Grandón.

La autoridad explicó que “esta ley, además introduce diferentes definiciones y disposiciones, creando un marco normativo mucho más sólido para gestión del riesgo de desastre en nuestro país, establece entre otras cosas, los comités de gestión del riesgo de desastres, definen los instrumentos de gestión, como planes de reducción del riesgo de desastres, planes de emergencia, mapas de amenazas y mapas de riesgos, entre otros. Introduce cambios en la ley orgánica constitucional de municipalidades, incorporando la función de gestión del riesgo de desastres, y finalmente, crea el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, que sustituirá a la actual Onemi, agregando nuevas funciones y responsabilidades”, cerró la directora Grandón.