Comenzó un nuevo año, época donde muchos aprovechan el buen clima para salir de vacaciones y disfrutar el calor que entrega el sol durante el verano. Pero también es la época perfecta para realizar una mantención adecuada a los equipos de calefacción sustentables, además de mejorar el acondicionamiento térmico de las viviendas, para combatir riesgos asociados a enfermedades respiratorias producidas por la humedad, condensación y alta contaminación que se da durante el invierno.

El revisar equipos de gas, eléctricos, pellet o de combustión a leña, como también el aislar techos y muros, sellar puertas y ventanas, revisar canaletas y controlar el nivel de potencia de los artefactos para que se mantengan en 20°C, es parte del trabajo que se debe hacer para reforzar la seguridad de los equipos y así reducir las emisiones contaminantes, beneficiando de esta forma la calidad del aire y la salud de las personas.

Recordemos que el Seremi del Medio Ambiente, Patricio Caamaño, sostuvo que “al realizar una adecuada mantención de los equipos y de las viviendas en esta época del año, en invierno se podría utilizar menos calefacción, además de cuidar el medio ambiente y ahorrar dinero”, agregando que “al mejorar la calidad de nuestra calefacción también mejoramos nuestra calidad de vida y protegemos la salud de toda nuestra comunidad”.

Los equipos que necesitan más mantención son las estufas a parafina, ya que el uso de la “mecha” se va gastando, produciendo malos olores y una llama poco pareja. Para esto, se recomienda que una persona calificada, para evitar una instalación defectuosa, cambien la mecha del equipo, a fin de evitar partículas contaminantes dentro y fuera del hogar. También se deberá vaciar el estanque para enjuagarlo y luego cargar con parafina limpia, idealmente que sea pura y sin mezclas, ya que eso afectará el funcionamiento de la estufa.

Otra estufa que de igual forma merece una mantención exhaustiva, y que es una de las mas usadas por los chilenos, son las que funcionan a gas, por lo que se recomienda que una vez a año se le haga mantención para evitar accidentes dentro del hogar. Limpiar el quemador principal y el piloto, ya que podría estar tapado y no dar una llama pareja, chisporrotear o hacer ruidos, es parte de lo que se debe hacer. También es importante revisar el regulador y manguera, verificar que estén en buen estado y no filtren gas.

En el caso de las estufas a pellet, estas requieren un correcto uso y funcionamientos del equipo para que esta se desempeñe de buena forma. Además, requieren de una limpieza más frecuente que las anteriores, ya que su combustión va soltando partículas que se adhieren a las paredes o conductor de ventilación, lo que a largo plazo puede resultar inflamable u obstruir el paso del humo hacia el exterior. En este caso se recomienda realizar una limpieza de cenicero cada vez que se utilice el equipo, ya sea con una escobilla o una aspiradora, para quitar las cenizas que queden luego de su uso.

Los calefactores a pellet son los que más ha entregado el Ministerio del Medio Ambiente a través del Programa de Recambio de Calefactores, alcanzando las 6 mil 778 estufas instaladas en la Intercomuna Chillán – Chillán Viejo desde el inicio del programa. Durante el verano continúa el proceso de instalación de estos equipos, un trabajo que debe ser realizado por un técnico certificado y con las competencias adecuadas para que este funcione de manera óptima de cara a la temporada de invierno.

Además, quien realice la instalación y mantención, deberá entregar toda la información necesaria a través de una capacitación a los beneficiarios para el correcto uso de las estufas a pellet.

Finalmente están los calefactores a leña, donde la limpieza del cañón depende del uso que se le dé, sobre todo si se utiliza con mayores niveles de humedad. Por lo mismo es que se recomienda siempre usar leña seca que sea de buena calidad, para lograr una combustión segura y verificar constantemente que el tubo que conduce el aire al exterior no esté obstruido.

Se recomienda que la mantención de cualquier tipo de estufa se realice una vez al año, antes de comenzar la temporada de invierno y con un servicio técnico calificado. Lo ideal es preferir calefactores que tengan bajas o nulas emisiones de material particulado y que tengan una potencia adecuada al tamaño de la vivienda.