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En medio de la región de Ñuble, un faro de transformación educativa ha emergido, desafiando no solo las convenciones tradicionales del aprendizaje, sino también abrazando un compromiso notable con el medio ambiente. El Liceo Bicentenario Técnico Puente Ñuble, ubicado en la comuna de San Nicolás, ha experimentado una evolución notable en los últimos años, con un énfasis particular en la integración y sostenibilidad medioambiental.

 

El director del establecimiento, Javier Palma Palma, lidera esta travesía educativa que ha llevado al liceo a convertirse en un referente regional. Palma destaca la importancia de un modelo educativo innovador, uno que se ha orientado hacia un enfoque integral y inclusivo, colocando énfasis en el desarrollo académico y técnico de los estudiantes. Este enfoque ha cosechado resultados notables, evidenciados en logros académicos, certificaciones en idiomas extranjeros y la integración de estudiantes en pasantías internacionales.

Sin embargo, más allá de los logros académicos, el Liceo se ha destacado por su compromiso con el medio ambiente. Dentro de su malla curricular, el establecimiento ha desarrollado una línea específica que aborda activamente las problemáticas medioambientales. Destacando la carrera técnico agropecuaria con un sello agroecológico, el liceo enfatiza prácticas agrícolas amigables con el entorno, fomentando la búsqueda de soluciones inclusivas y sostenibles.

Además, los esfuerzos no se limitan al aula. El establecimiento ha asegurado proyectos de financiamiento para la implementación de sistemas de energía solar, evidenciando así un compromiso tangible con la reducción de su huella de carbono. La innovación tecnológica también se ha convertido en un pilar esencial, con el desarrollo de nuevas carreras y programas que se alinean con la necesidad de emprender e innovar en armonía con el entorno.

Este enfoque integral, que va más allá de la educación académica convencional, ha permitido que la comunidad vea al Liceo como un agente de cambio no solo en la formación de sus estudiantes, sino también en la promoción de valores ecológicos y sostenibles.

Los desafíos futuros del liceo no solo implican la mejora constante de su modelo educativo, sino también la continuación y expansión de su compromiso con el medio ambiente. La implementación de nuevos programas y la renovación de la infraestructura se alinean con esta visión de evolución constante, asegurando que el establecimiento se mantenga a la vanguardia de la educación ecológica.

En un mundo donde la conciencia medioambiental es crucial, el Liceo Bicentenario Técnico Puente Ñuble demuestra un modelo educativo en evolución, uno que no solo nutre mentes, sino también corazones comprometidos con un futuro sostenible. Su enfoque integral hacia la educación, la innovación tecnológica y el cuidado del medio ambiente marca un camino ejemplar que trasciende el aula, dejando una huella significativa en la comunidad y en el mundo que los rodea.