Estiman que Más de 50 Mil Personas Celebraron las Fiestas Patrias en Parque Ramadero de Quillón
Más de 140 locales y música en vivo estuvieron a disposición de los asistentes, durante los seis días de funcionamiento. El feriado XL dejó cuentas alegres para algunos y otras no tanto para otros, quienes argumentaron que el horario limitado y las intensas lluvias les jugaron en contra.
Unos sacaron cuentas alegres y otros no tanto. Así fue el balance de la celebración de Fiestas Patrias XL en Quillón, donde se estableció el parque ramadero más grande de la Región de Ñuble.
Y es que los días de intensa lluvia y la autorización de horario limitado -hasta la 1 de la madrugada-, dispuesto por la Delegación Presidencial Regional, habrían sido los detonantes de seis días no muy buenos, según algunos ramaderos.
“Al principio nos afectó harto el horario, porque a esa hora de las 11 y 12 de la noche empieza a llegar la gente. Lo otro es el temporal que hubo, porque definitivamente la gente no salió y nosotros tenemos que estar igual acá, respondiéndole al público. Lo invertido no se va a recuperar, uno más encima tiene que seguir pagándole a la gente que trabajó, llegue o no llegue gente”, aseguró José Miguel Ulloa, dueño de la Ramada Clarita.
Respecto de las intensas lluvias del 19 y 21 de septiembre, éstas causaron algunos estragos, que fueron subsanados a la brevedad, por parte de los equipos municipales, permitiendo el funcionamiento normal del parque ramadero.
Un total de 141 locales se dispusieron en el recinto fondero durante los seis días de celebración, distribuidos en cuatro ramadas, seis cocinerías, seis foodtrucks y 23 stands de tragos típicos, entre otras localidades. Todo debidamente resguardado por Carabineros, personal de Seguridad Ciudadana y guardias privados, lo que arrojó un balance positivo, respecto de la seguridad.
“Para nosotros como municipalidad es bastante positivo cómo funcionó todo, la infraestructura, los espacios. Fueron cinco días muy intensos de trabajo para los expositores. Sin embargo, vemos que todo funcionó muy bien y hubo un buen comportamiento del público. Sabemos que algunos ramaderos se quejaron por el horario de funcionamiento del parque. Nosotros solicitamos una extensión horaria a la Delegación Presidencial, haciendo todos los trámites administrativos para funcionar hasta las 4 de la mañana, pero lamentablemente no se pudo extender y debimos cumplir con la instrucción de la Delegación Presidencial. Aún así, estamos felices por el comportamiento de nuestros visitantes, de los expositores y de cómo funcionó todo”, indicó el alcalde Miguel Peña.
PÚBLICO SATISFECHO
Los que también sacaron cuentas alegres fueron los asistentes al parque ramadero, quienes pudieron disfrutar de espectáculos musicales en vivo, juegos criollos y concursos varios, durante todos los días de fiesta; además de un sinnúmero de alternativas para pasar un rato agradable en familia y en la más completa seguridad. Se estima que más de 50 mil personas pasaron por el recinto, en los seis días de celebración.
“Supimos de estas ramadas en Quillón, pero no pudimos venir los primeros días, ya que fuimos a otras ramadas a Pinto y San Nicolás, aparte la lluvia complicó todo. Pero llegamos acá y nos sorprendimos, muy buena, harto espacio, diversidad, hay de todo y un show muy bonito. Nos arrepentimos de haber ido a las otras ramadas, porque deberíamos haber venido acá los demás días, con los niños y en familia”, destacó Álvaro Mella, visitante de Chillán.
De igual manera, Elizabeth Amarza puntualizó en que “es un ambiente agradable, tranquilo, hemos bailado harto. Todo ha estado rico y bien, salvo la lluvia que debe haber afectado a la gente que trabaja acá, pero en general todo bien y los precios bastante accesibles, la comida buena, impecable todo”.
Variedad y alternativas para todos los gustos tuvo el parque ramadero de Quillón, que fue destacado por sus visitantes en distintos aspectos, sobre todo la seguridad. Y para aquellos que quedaron con gusto a poco, la municipalidad ya está realizando las gestiones para, posiblemente, celebrar un “Dieciocho Chico”, con la esperanza de buen tiempo y de que aquellos que no tuvieron buenas ventas, puedan resarcir la mala racha que les dejó otro típico de la fecha, la lluvia de Fiestas Patrias.